No quiero otoños sin ti
Ni abriles perplejos en el cristal
En las frías madrugadas que parecen no acabar
Cuando la brisa se cala en la ventana
Y tu sombra parece cubrir todo alrededor
Desvaneciéndose lentamente en el umbral de mis recuerdos
En la reminiscencia de mi alma
Perdiéndose en mi desolada soledad
La cual habita en cada rincón de mi ser
A la espera de tu retorno sin final.
0 comentarios:
Publicar un comentario